Malos hábitos para tus dientes.

Irse a la cama sin cepillar los dientes porque no generamos saliva y es un factor alto de defensa contra la caries dental, con lo que tenderá a la halitosis o mal aliento, y luego iniciará el proceso de desmineralización para terminar con una caries dental.
El consumo de vinos en exceso en las comidas, por ejemplo el vino tinto genera unas manchas severas y profundas en los dientes y el vino blanco es ácido y provoca la desmineralización de los dientes, entonces eliminar el exceso de consumo de vino y luego cepillarse los dientes.
El exceso de consumo constante del chicle, si bien es cierto que nos genera una limpieza mecánica, también puede generar desgaste, malformación de los músculos de la madíbula, y generará problemas de bruxismo y rechinar dientes.
Abuso de los dientes comiendo uñas, destapando bolsas, mordiendo lapiceros, que produce fracturas o desgaste severos en el esmalte.
Mala técnicas de cepillado dental, cepillado fuerte con cepillo duro desgasta los dientes y retrae encías, se traduce en dolor y sensibilidad cuando comemos algo.
Fumar: el tabaco genera unas manchas que se adhiere a los dientes que en unión de la placa bacterias genera daño en el esmalte de las encías, y también mal aliento.